Indemnizaciones por Accidente Laboral: Guía Completa

En el ámbito laboral, los accidentes pueden ocurrir en cualquier momento y lugar.
Es fundamental conocer los derechos que asisten a los trabajadores y las diferentes indemnizaciones a las que pueden acceder en caso de sufrir un accidente laboral.
En este artículo, abordaremos detalladamente los tipos de indemnizaciones por accidente laboral, las prestaciones de la Seguridad Social y el procedimiento para reclamarlas.
El marco legal que regula los accidentes laborales en España se encuentra en la Ley General de la Seguridad Social y en la Ley de Prevención de Riesgos Laborales. Estas normativas establecen las obligaciones de las empresas y los derechos de los trabajadores en materia de seguridad y salud laboral.
Tipos de indemnizaciones por accidentes laborales
Cuando un trabajador sufre un accidente laboral tiene derecho a una serie de prestaciones e indemnizaciones.
La mayoría de los trabajadores no cobra todas las prestaciones e indemnizaciones a las que tiene derecho por falta de información.

Tras sufrir un accidente laboral, el trabajador tiene derecho a una serie de prestaciones económicas y asistenciales proporcionadas por la Seguridad Social.
Incapacidad Temporal
La incapacidad temporal se concede cuando el trabajador está impedido temporalmente para desempeñar su labor. Durante este periodo, tiene derecho a un subsidio que oscila entre el 75% y el 100% de la base reguladora, dependiendo de las circunstancias y convenios colectivos aplicables.
Incapacidad Permanente
Si las lesiones derivadas del accidente generan secuelas definitivas, se puede reconocer una incapacidad permanente, que puede ser:
Parcial: disminución no inferior al 33% en el rendimiento normal de la profesión habitual. La indemnización por incapacidad parcial es de 24 mensualidades de la base reguladora
Total: inhabilita al trabajador para su profesión habitual, pero puede desempeñar otra distinta. No genera una indemnización pero si una pensión del 55% de la base reguladora
Absoluta: incapacita al trabajador para toda profesión u oficio. Tampoco genera una indemnización pero si una pensión del 100% de la base reguladora
Gran Invalidez: además de la incapacidad absoluta, el trabajador requiere asistencia de tercera persona para las actividades básicas de la vida diaria. La pensión en este caso sería del 15% de la base reguladora.
Indemnizaciones por Lesiones Permanentes no Invalidantes
Cuando las lesiones producen secuelas que no incapacitan al trabajador pero afectan su integridad física, se puede acceder a una indemnización Esta compensación se calcula según un baremo establecido legalmente, considerando la naturaleza y gravedad de las lesiones.

Recargo de Prestaciones
Si el accidente se produjo por falta de medidas de seguridad o incumplimiento de la normativa de prevención por parte de la empresa, se puede aplicar un recargo de prestaciones. Este recargo, que oscila entre el 30% y el 50%, incrementa las prestaciones económicas a cargo exclusivo del empleador.
Para obtener el recargo de prestaciones, es imprescindible la participación de Inspección de Trabajo que puede actuar de oficio en los accidentes graves pero siempre es recomendable la denuncia del trabajador en el resto de los accidentes.
Seguro de Convenio Colectivo
Muchos convenios colectivos establecen la obligación de las empresas de contratar un seguro que cubra determinados riesgos laborales. Este seguro puede contemplar indemnizaciones en caso de accidente, incapacidad o fallecimiento del trabajador, según las condiciones pactadas. La mayoría de los convenios establecen una indemnización diferente en función de la Comunidad Autónoma e incluso de la Provincia. Hay que revisar tanto los convenios nacionales, provinciales e incluso los convenios propios de las grandes empresas para poder reclamar las indemnizaciones que corresponda.
Responsabilidad Civil de la Empresa
La empresa puede ser responsable civilmente si se demuestra negligencia o incumplimiento en materia de seguridad laboral. En estos casos, el trabajador puede reclamar una indemnización por los daños y perjuicios sufridos, que incluye aspectos como:
Daño moral: sufrimiento psicológico o emocional.
Perjuicio estético: alteraciones físicas visibles.
Lucro cesante: pérdida de ingresos futuros debido a la incapacidad.
Esta es la indemnización más cuantiosa que puede cobrar un trabajador. En este caso la intervención de Inspección de Trabajo también es fundamental para que se pueda demostrar la omisión de medidas de seguridad por parte de la empresa. La existencia de un acta de infracción y un recargo de las prestaciones suele garantizar el cobro de la indemnización por responsabilidad de la empresa y es el seguro de dicha empresa quién tendrá que hacer frente a las indemnizaciones.
Aunque no existe un baremo específico para accidentes laborales, se utiliza como referencia el Baremo de Accidentes de Tráfico establecido en la Ley 35/2015.
Este baremo proporciona criterios para cuantificar indemnizaciones por lesiones, secuelas y fallecimiento.
El cálculo de los daños y perjuicios debe reflejar una reparación íntegra al trabajador, considerando:
Daño emergente: gastos efectivos derivados del accidente.
Lucro cesante: ingresos que el trabajador deja de percibir.
Perjuicio personal: impacto en la calidad de vida y actividades cotidianas.
El daño emergente abarca los gastos inmediatos, como tratamientos médicos, adaptaciones en el hogar y otros costos necesarios.
El lucro cesante se refiere a la pérdida económica futura causada por la disminución de la capacidad laboral.
En principio el plazo para reclamar una indemnización por omisión de medidas de seguridad es de 1 año desde la estabilización de las lesiones.
Para el seguro de convenio el plazo sería de 5 años desde el reconocimiento de la incapacida permanente o desde el fallecimiento.
Conocer los tipos de indemnizaciones por accidente laboral y los derechos que asisten a los trabajadores es fundamental para garantizar una protección efectiva.
Ante cualquier incidente, es imprescindible actuar con prontitud, asesorarse legalmente y seguir los procedimientos establecidos para reclamar las compensaciones correspondientes.

Procedimiento para reclamar una indemnización
Si has sufrido un accidente de trabajo y crees que puedes estar en situación de incapacidad permanente, es importante que sigas los pasos adecuados para solicitarla. Este proceso puede parecer complicado, pero con la información correcta, podrás enfrentarlo con mayor confianza.
Lo normal es que la mutua laboral te proponga directamente para pasar el tribunal médico una vez has agotado el plazo de incapacidad temporal (12 meses con posibilidad de una prórroga de 6 meses más). Pero si la mutua no te propone puedes solicitarla por tu cuenta siguiendo estos pasos:
El primer paso es recopilar toda la documentación que acredite tu situación médica. Esto incluye informes médicos, partes de baja laboral, y cualquier otro documento que demuestre las secuelas del accidente. Si la incapacidad es derivada de un accidente laboral la mutua te proporcionará todo el historial médico que podrás complementar con cualquier otro informe que puedas tener de la Seguridad Social o médicos privados.
Una vez que tengas toda la documentación, debes iniciar el proceso ante el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) o el órgano correspondiente de tu comunidad autónoma. El trámite implica la presentación formal de tu solicitud de incapacidad, que será evaluada por una comisión médica.
Si la resolución es negativa debes acudir a nosotros para reclamar la pensión de incapacidad por vía judicial